Por Jennifer Velásquez

Imagen: Facebook «Nos damos cuenta del Acoso»

El acoso sexual es un tipo de violencia. Este suele tener dos únicos protagonistas: acosador y víctima. Sin embargo, un grupo de investigadoras de la Universidad de San Carlos de Guatemala, la única universidad pública del país, han comenzado a desarrollar una investigación para conocer el rol que tienen las, los y les testigos frente al acoso sexual dentro de los campus universitarios y buscan evidenciar cómo todas las personas están relacionadas directa o indirectamente con la violencia sexual.

En Guatemala, desde hace algunos años existen instituciones que comienzan a nombrar y poner sobre la mesa el tema del acoso sexual. Este es el caso del Observatorio Contra el Acoso Callejero en Guatemala (OCACGT), colectivo que realiza investigación e incidencia en materia de acoso callejero en Guatemala. Por otro lado, está la Red Interuniversitaria Seguras y Educadas (RISE) quienes se nombran como una plataforma de cooperación interuniversitaria contra el acoso sexual. Asimismo, medios independientes han realizado investigaciones sobre la temática.

Mapeos, esfuerzos, cuestionarios y testimonios de parte de las instituciones han arrojado resultados sobre el acoso sexual en las universidades. Sin embargo, la investigación Entendiendo el acoso basado en género y el comportamiento de los espectadores en los campus universitarios de la Universidad de San Carlos de Guatemala es la primera investigación en Guatemala que busca conocer el rol de las, los y les espectadores y testigos frente al acoso sexual en la universidad de San Carlos de Guatemala.

Esta investigación está siendo desarrollada a través de un cuestionario que busca recopilar respuestas y variables para conocer más sobre la percepción de las, los y les testigos frente al acoso sexual en la universidad. El equipo que realiza el estudio está integrado por seis investigadoras en colaboración con la Universidad de Liverpool John Moores.



La Antígona conversó con Numa Dávila y Lia Rabanales para conocer más sobre su labor.

¿Por qué una investigación para conocer el rol de las, los y les espectadores?

Lia Rabanales: Durante los últimos años las estudiantas de la Universidad de San Carlos de Guatemala han argumentado la necesidad de implementar dinámicas, acciones y normativas que  permitan prevenir y accionar frente al acoso sexual. Se suelen mencionar a tres componentes en el acoso sexual: acosador, víctima y suceso, pero ¿será estos todos los implicados? 

Numa Dávila: De acuerdo con un estudio exploratorio sobre acoso en la universidad, las respuestas más comunes comentaban que las violencias se llevaban a cabo dentro de las mismas facultades: en pasillos, aulas u oficinas administrativas, siendo en especial personas de la misma unidad académica las que cometen dichas agresiones.

Lía o Numa: Yo creo que definitivamente un gran desafío es “tirarnos la pelota”. Es decir, nos posicionamos fuera de los círculos de violencia, cuando aún así tenemos relación, inclusive como espectadores. Entonces suele ser confrontante decir que entre espectadores somos parte de la problemática. 

La investigación quiere conocer las variables, barreras y conocer por qué intervienen o no las, los y les testigos frente al acoso. Definitivamente es un desafío porque confronta a quien responde el cuestionario.

Si yo he presenciado algún hecho de violencia en la universidad o en un espacio público, ¿cómo puedo contribuir a erradicarlo o cómo puedo prevenirlo?

Lía o Numa: Hablarlo es un paso pequeño, pero ya comienza a ser un avance. Queda aún mucho por conocer sobre el papel de los espectadores frente al acoso. Pero, por un lado, reconocernos como sujetos implica tomar consciencia de nuestras posibilidades de transformar la realidad y de algún modo eso nos lleva a reconocer situaciones en las cuales podemos intervenir. Romper la cultura del silencio tampoco es sencillo, pero comenzar con acciones pequeñas como acercarnos a alguien que está siendo acosada puede ser una opción. Por otro lado, educar e informarnos también es necesario. Conocer cómo y qué es el acoso sexual y como puede ser expresado, nos ayudará a identificarlo.

Actualmente, el equipo ha cerrado el cuestionario y ha logrado recopilar más de 1.000 respuestas cualitativas que permitirán un mejor análisis de resultados.